Los becarios, como sabemos, son aquellas “personas que disfrutan una beca para estudios”. Por lo general se trata de estudiantes que realizan prácticas en diferentes empresas para cumplir con algún requisito de sus centros de estudio. O bien, para poder aplicar los conocimientos adquiridos en una situación real. Existen prácticas curriculares y extracurriculares, siendo obligatorias o como algo extra, respectivamente.
Desafortunadamente, en México aún no existe una regulación oficial para ellos. Por lo que no siempre se pueden aplicar derechos u obligaciones marcadas por la ley, no obstante, existen programas de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, como lo es Jóvenes Construyendo el Futuro. Algunas empresas o centros de estudio se guían por los parámetros que contienen programas como este.
Algunas universidades tienen su propio reglamento, como es el caso de la UTC (Universidad Tecnológica de Coahuila) que posee un apartado en el cual podemos observar que se establecen cuáles son los derechos y obligaciones de los becarios. Entre los cuales encontramos la posibilidad de recibir una beca, renovarla y así mismo cuales son las características que un becario debe poseer.
En el caso específico de la campaña de Jóvenes Construyendo el Futuro, nos encontramos que además de otorgar seguro médico a sus becarios, otorgan una remuneración mensual la cuál es llamada beca. De igual manera establece que además de estos beneficios, los becarios deben recibir “un trato digno, respetuoso, oportuno, con calidad y equitativo, sin discriminación alguna”.
Aunque estos son casos específicos, siempre hay elementos generales que todo becario debe poseer. Se tengan o no parámetros para la contratación siempre se debe tener en cuenta distintos factores que son prácticamente el derecho de un becario antes, durante y después de iniciar sus prácticas en cualquier instancia. A continuación, enlistaremos algunos de ellos.
Contrato o convenio
Así como los trabajadores, los becarios tienen el derecho de contar con un contrato. Este debe estar firmado por el estudiante, el centro de estudios correspondiente y la empresa a laboral. En el contrato, se deben especificar las tareas y actividades a realizar. De igual manera, hay que mencionar las condiciones del contrato, responsabilidades y el horario a trabajar. Así mismo no hay que olvidar el tiempo de duración del convenio.
Se debe informar por completo de las normas de la empresa, así como una posible capacitación.
Aprender
Como ya sabemos, los becarios siguen en formación. Las prácticas son una forma de adquirir experiencia y aprender del mundo laboral. Es su derecho aprender de un profesional, es por lo que siempre debe de haber una persona designada a la supervisión del trabajo de un becario. Aun cuando confiemos en las capacidades de los becarios, siempre es importante “tener un ojo” en lo que realizan, ya que están realizando trabajo para una empresa.
Deben tener acceso a cualquier información necesaria, así como contar con el material necesario para realizar sus actividades satisfactoriamente. El ambiente en el que se desarrollen debe ser el óptimo.
Evaluación
Así como los otros empleados son evaluados, los becarios tienen el derecho de contar con una evaluación. Así como también ser evaluados. Esto con el fin de mejorar su forma de trabajo o encontrar aquello en lo que carezcan. Al estar en constante comunicación se pueden obtener los mismos resultados. Sin embargo, de vez en cuando una evaluación con respecto a la empresa o el trabajo que realiza nunca está demás.
Así como los becarios poseen distintos derechos, es importante recalcar el hecho de que también tienen obligaciones que deben cumplir. Estas, como mencionamos con anterioridad, no están reguladas de forma oficial, por lo que las empresas son libres de establecerlas. No obstante, hay que tener una guía, esta puede ser la ley del trabajo o distintos programas públicos que pueden ser de gran ayuda.